Planeta Gastro ha publicado el libro de Romain Fornell es uno de los referentes ineludibles de la nueva cocina francesa desde que a los 22 años fue coronado con su primera estrella Michelin.
En Chef, el mejor representante de la cocina francesa en España, reflexiona sobre el peso de la gastronomía de su país y cómo esta forjó su andadura de Francia a España, para encontrarse en una ciudad, Barcelona, en la que colisionaban sin miedo el lado más tradicional de la cocina mediterránea y la aparición de una rama rebelde, moderna y rompedora: la más disruptiva que jamás han presenciado los fogones del planeta Tierra. Con pericia, recetas, sentido del humor y un profundo conocimiento del universo culinario, Fornell aborda en Chef las mil maneras de entender el plato en la mesa y nos acaba convenciendo de cuál deberíamos utilizar, de la definitiva: la suya.
En el prólogo Guillaume Gomez manifiesta que “después de pasar más de media vida detrás de los fogones, ¡ya era hora de que Romain Fornell compartiese sus recetas
con nosotros! Esta recopilación es el culmen de todo ello, con apasionados de la cocina, franceses, españoles, francoespañoles... Sin importar su procedencia, los platos explicados, descritos y presentados en este volumen te deleitarán. Romain Fornell nos recuerda estos platos de toda la vida en este excelente libro de recetas que colma de consejos prácticos y concretos: cómo cocer tal cosa, preparar tal otra, elegir este producto, el porqué de elegir aquel... o simplemente cómo no saltarse la cena. Así que, déjate guiar, descubre y redescubre, pero ¡atrévete! Sitúate ante los fogones y sigue los consejos del chef Fornell, probando, saboreando y deleitando a los que más quieres. Un libro para tener siempre a mano a modo de manual práctico. A base de consultarlo y de practicar, pronto la historia de tu cocina se asomará entre sus páginas junto a las huellas de tus logros, por lo que acabará convirtiéndose en un imprescindible”.
Fornell nació en Toulouse, una ciudad al sur de Francia que no llega al medio millón de habitantes. Como él afirma, su tradición culinaria no es gran cosa si la comparas con imperios gastronómicos como Lyon o París, pero allí aprendí a cocinar cuando en realidad lo que quería era no aprender nada. Dejé el colegio a los 15 años, y tratando de aprender algo práctico fui a parar a una escuela de cocina en la que finalmente pasaría tres años. Me sucedió algo raro en aquel sitio y es que yo, un chaval que odiaba las cadenas jerárquicas o la disciplina, empecé a pensar que sí, que estaba bien rendir pleitesía al orden en lugar de al caos, y que mandar molaba.
Explica que “descubrí que podía coger tres ingredientes que aparentemente no tenían relación entre sí, manipularlos, mezclarlos y sacar un plato maravilloso. Había otros chavales allí cocinando conmigo, pero yo era el mejor. Y, como me gustaba, me esforzaba más y, cuanto más me esforzaba, mejor era. Porque con la práctica llega la destreza y con la destreza la excelencia”.
Un libro imprescindible para los amantes de la cocina de Romain Fornell.